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Amor entre hombres

2 comentarios
"...y Alberto divisó por fin a Ramón. Habían pasado tantos años sin verlo, y nunca había dejado de pensar en él. Corriendo, se arrojó a sus brazos y estalló en lágrimas. Sintió que todo su amor por él se desbordaba al sentir su cuerpo, su olor, su aliento."

Y es que si somos muy cariñosos con nuestros amigos, nos tratan de homosexuales.
Si queremos a nuestras amigas, entonces estamos tratando de acostarnos con ellas.
Si dos amigas se abrazan mucho, es que las ven como lesbianas.
Si somos cariñosos con un niño, es que tenemos tendencia a la pedofilia.
Si lo somos con un viejo, es que queremos algo con él.



Y la persona más dura, la más insensible es la mejor. Esa que no necesita a nadie, que no se altera ni desespera. Esa que no sufre por otros, que vive su vida.



No deja de ser irónico que desde pequeños buscamos por instinto la compañía y el amor. ¿Cómo es que llegamos después a comportarnos de forma tan contraria a nuestra naturaleza, y elegir el aislamiento y la indiferencia? Algún seguidor de Nietzche dirá que una persona solo buca la compañía y el amor de otros por conveniencia. Nada más cierto, aunque Nietzche no me agrada. Por supuesto que 'conviene', pues es parte de nuestra naturaleza.

Lo extraño es que terminamos renegando de nuestra escencia. Vemos los actos de amor como signos de debilidad. El llorar y la pena como cosas de mujeres (en el caso de los hombres) o de gente simplona.

La otra vez leí algo respecto a eso que una amiga me mostró (no sé si estaba escrito por ella, me parece que no). Pongámonos a pensar: ¿Cuántas veces saludamos con una sonrisa cordial y amable? No esperemos a que la otra persona lo haga primero, o caeremos en una rueda sin fin. ¿Cuántas de esas veces que nos despedimos diciendo 'que te vaya bien' en REALIDAD tenemos el deseo de que a esa persona le vaya bien? ¿Cuántas veces abrazamos a alguien al saludar o al despedirnos? Puede que nos sea difícil, y es normal. Es raro demostrar cariño por personas poco conocidas.

Aunque desde cierto punta de vista, no hay nada que nos impida hacerlo. Podemos darnos cuenta de que falta amor en nuestra sociedad. Pero tal vez deberíamos tratar de hacer algo al respecto. No se trata de ir a saltitos por el medio de la calle arrojando pétalos de flores mientras silbamos una melodía alegre. Podríamos empezar con saludar cordialmente cuando vamos a comprar, cuando nos topamos con algún vecino o llegamos a nuestro colegio/universidad/trabajo/pub/bar/casa/barrio. Tal vez baste con sonreir. No hablo de esa sonrisa cínica o mecánica. Sino de sonreir pensando en que uno desea que la persona se sienta bien debido a la sonrisa que le doy. Es increíble como una persona fría y dintante puede cambiar mucho su forma de tratar si siente ese tipo de cariño hacia ella.




Hay muchas formas de empezar a mostrar amor a otros, y de olvidarse de esos insensatos cuentos que hablan de que la hombria, la frialdad y la indiferencia son las características de la gente de éxito.

PD: el texto con que empieza este artículo lo escribí yo mismo, pensando en el reencuentro ficticio de dos hermanos que se se habían separado hace años, por si a alguien le quedan dudas :P

2 comentarios :

MaGoX dijo...

Creo que el prejuicio son cosas de todos, y el ser poco social tambien puede ser un metodo de defenza, yo me considero un tipo socialmente poco social, no me gusta estar donde hay mucha gente pero si estoy con alguien trato de ser agradable, porque si yo estuviera en sus zapatos no me gustaria que me trataran mal.

aparte los prejuicios tambien van en funcion del lugar geografico, ejemplo en argentina los amigos se saluda con un beso en la mejilla, y en cambio en chilito seria un simbolo de uuuuhhhhiiii se les queda la patita atras. jajaja

bueno nos vemos pelao xd

Angelorum dijo...

Bueno, eso que dices le pasa a muchos, el "ser socialmente poco sociales",como dices.

Pero es que alguien tiene que romper el hielo primero. No podemos todos quedarnos aparte, a menos de que la soledad ser la forma de vida elegida voluntariamente, y no por imposición o resugnación, como es el caso de algunas personas.

Saludos :)