Rumores del verano

El sol resplandeciente en las alturas. La hierba verde, los arbustos frondosos y los altos árboles a ambos lados del sendero. Aroma a naturaleza naciente, olor a verde, a verde vivo, a tierra fértil.

El rumor de la brisa tibia entre las ramas sirve de arrullo al ambiente. La sombra proyectada, seductora y refrescante, invita a dejarse abandonar entre el murmullo del ambiente ensoñador. Todo el paisaje respira vida entre los vaivenes del viento y el crujir de las ramas secas al pisarlas, y nos susurra al oído acerca de una existencia infinitamente más antigua, dotada de una inconmensurable tranquilidad que envuelve suavemente todo a su alrededor como si fuera una cuna donde un gigante dormido descansa mientras la eternidad avanza en su paso por el universo.

El verano se aproxima.