Por favor, haz un clic sobre los anuncios cuando pases por mi blog, ya? =)

Para las personas sin pensamientos propios

No hay comentarios

Hay ciertas circunstancias que hacen que ciertas personas de ciertas características, lleguen a adquirir un grado de inseguridad e indecisión inmenso en su vida. Personas que por un largo tiempo han sido sometidas a un régimen en donde sus propias decisiones nunca han sido valoradas, donde nunca se les han preguntado opiniones y que mucho menos se les ha dejado libres de hacer lo que mejor les parezca.

Podemos encontrar ese tipo de personas en situaciones de esclavitud, regimenes autoritarios y hogares en donde la palabra de los padres es la primera, la última y la definitiva, sin importar si está bien o mal.

Dichas personas pueden a lo largo del tiempo concluir que siempre deberán hacer lo que algun otro les dice, y que la forma de caer bien o encajar en un lugar es adaptándose a las costumbres y los gustos de los demás.

Sin embargo, si a algunas de esas personas les queda dentro un sentimiento de deseo de libertad, intentarán encontrarla lo mejor que puedan. Posiblemente sea buscando a algo o alguien que tenga ideas mas atractivas que las que les imponen quienes les someten. Y es probable que si encuentren a alguien con esas ideas, traten de aprender de esa persona, y con el paso del tiempo adopten las nuevas ideas como suyas propias, en especial si es que se comienzan a sentir mejor.

Sin embargo, solo habrán cambiado un régimen por otro. Ahora imaginarán que deben pensar y sentir como piensa la persona que tiene las nuevas ideas, porque así se han acostumbrado a ser. Y aunque la persona de las nuevas ideas no les imponga ni exija nada, ellas se sentiran como si así fuera, porque es la forma como están formadas sus estructuras mentales, las cuales no se han roto, solo han cambiado de emisor de autoridad.

Tales personas temerán ser espontáneas, pues en su mundo eso no es aceptable, pues ellas creen que deberán siempre estar luchando por cumplir con lo que se espera de ellas, aunque piensen distinto.

Por lo tanto, difícilmente podrán abrazar como suyas algunas ideas que impliquen un cambio profundo en la personalidad, pues solo pretenderán hacerlo para seguir con las "normas" que creen ver en todo.



Y cada vez que algo les moleste, en vez de decirlo se lo guardarán y cuando ya no puedan contenerlo, lo dirán con miedo o con rabia, sintiendo por una parte que necesitan decirlo, y por otra un hondo sentimiento  de culpa por hacerlo, además del miedo de resultar rechazadas, heridas o ser objeto de burla por actuar así. Pues, el adoctrinamiento de años les ha acostumbrado a callarlo todo.

¿Hasta cuando podría durar una persona de esas características, siguiendo una nueva idea que le hace sentir mejor, pero que no es capaz de abrazar como suya, porque aun no logra liberarse de sus cadenas y controlar su vida? Pues, durará hasta que aparezca  alguien con ideas mejores, o bien alguien que le demuestre que esas ideas mejores eran solo una farsa (sea con pruebas reales o con mentiras).  Es más, puede que otros, molestos porque esa persona está por fin empezando a hacer crecer sus alas y a actuar en forma independiente, la convenzan apelando a sus miedos mas profundos de que lo que hace está mal, que debe dejar esas nuevas ideas y volver a su jaula donde solo debe obedecer a sus superiores, sus amos o sus padres.

Hay dos energías que pueden impulsar a ese tipo de personas, desprovistas de decisión. La primera es el deseo de cambiar, de ser libre, de escapar de ese miserable estado. Por ese motivo buscarán ideas más altas que las suyas, que les permitan ser independientes.

La segunda es el sentimiento de inercia. El miedo a cambiar, la creencia inculcada por costumbre de que es mejor quedarse como están, obedeciendo a quienes obeceden, en su pequeño lugar "seguro".

Y aunque empiecen a abrazar una nueva forma de ser, si aun tienen miedo por dentro, miedo de confiar, de atreverse, de liberarse, es fácil que venga alguien y utilice ese miedo para hacerlos rechazar esas nueva forma de ser y volver a la sumisión y al encierro emocional. Pues jamás tuvieron pensamientos propios, jamás llegaron a pensar realmente como decían, sino que solo siguieron haciendo lo de siempre: obedecer.

Y en muchos casos el miedo triunfará y volverán al encierro.

No hay comentarios :